Papa León XIV: Sale a la luz VIDEO inédito que muestra el talento oculto de Robert Prevost

Un video inédito ha sorprendido a miles de personas al mostrar un momento poco conocido de la vida de Robert Prevost, hoy Papa León XIV. La grabación revela un talento oculto del Sumo Pontífice que ha conmovido al mundo, su faceta artística y pastoral, captada mucho antes de asumir el liderazgo de la Iglesia. Este video, filmado hace más de una década, pone en evidencia la calidez y sensibilidad de quien ahora ocupa el trono de San Pedro.

El material fue grabado en 2014 durante una celebración navideña en Perú, cuando Prevost aún no era Papa León XIV, sino un religioso comprometido con la comunidad local. En las imágenes se le ve cantando villancicos con entusiasmo, rodeado de fieles, lo que ha despertado una oleada de comentarios positivos. Muchos señalan que este gesto sencillo refleja la cercanía y humanidad que caracterizan a su pontificado.

Prevost tuvo una profunda relación con América Latina, especialmente con Perú, donde fue obispo de Chiclayo entre 2015 y 2020. Su paso por esta diócesis se distinguió por un fuerte compromiso con las comunidades marginadas, así como por su liderazgo espiritual basado en la escucha, el acompañamiento y la acción social. El video inédito también confirma su capacidad para conectar con la gente desde la sencillez y la música.

Antes de su elección como Papa León XIV el 8 de mayo de 2025, Robert Prevost ya había dejado huella como prior general de la Orden de San Agustín. Su vocación agustiniana se refleja en cada gesto: vida comunitaria, contemplación activa y servicio. El video que hoy recorre el mundo es, para muchos, una prueba más del carisma con el que ha sabido ganarse el respeto dentro y fuera del Vaticano.

El talento oculto revelado por este video no solo destaca una habilidad musical, sino que reafirma su espíritu pastoral, su cercanía con las personas y su visión de una Iglesia inclusiva. En un tiempo en que el mundo necesita líderes auténticos, Papa León XIV se presenta como un rostro humano, alegre y comprometido con la fe viva y activa.